* El esperpento es un estilo literario creado y denominado así por Ramón María del Valle-Inclán, y que se caracteriza por la exposición del cuerpo feo desnudo ante los ojos de la literatura, y de la violencia verbal, los detalles grotescos y extravagantes, y una visión amarga y degradada de la realidad, todo ello puesto al servicio de una implícita intención crítica de la sociedad española de su tiempo. Como afirmó Valle-Inclán en Luces de Bohemia (obra representativa del estilo y donde este es definido), "el sentido trágico de la vida española sólo puede ofrecerse con una estética sistemáticamente deformada". Esta técnica se empleó también en la trilogía Martes de Carnaval y tiene sus precedentes en Quevedo y Francisco de Goya. Algunas de sus características son:
Lo grotesco como forma de expresión:
la degradación de los personajes.
la reificación o cosificación de los personajes, reducidos a mero signo o a muñecos.
la animalización o fusión de formas humanas y animales
la literaturización del lenguaje coloquial, frecuentemente investido de todo tipo de intertextualidades.
el abuso del contraste
la mezcla de mundo real y de pesadilla
la distorsión de la escena exterior
La deformación sistemática de la realidad:
la apariencia de burla y caricatura de la realidad
el significado profundo, semi transparente, cargado de crítica e intención satírica que constituye la auténtica lección moral
La presencia de la muerte como personaje fundamental.
*
>Haries<
2 comentarios:
Buena figura esta del esperpento, a mí me recuerda a aquellos carteros que bufan como mulos, que se autoproclaman gran trabajador...esos que reparten 70 certificados, dos mil cartas..."soy una máquina", "soy el machaca de la casa".
Triste y grotesco ver sus "hazañas", de como quedan sembrados los patios de cartas, de cómo se amontonan certificados sin recoger por ser mal o nunca avisados...
Proclamando a los cuatro vientos, como si con ello pudiera herirnos de envidia: "tú que no puedes".
Sii...Y también se puede interpretar como llevar la carga de quienes los venden día tras día, utilizándoles para mantener sus puestos "sindicales". Dándoles cursillos, pidiendo votos personalmente...Y los currantes SIGUIENDO pagando sus cuotas.
Publicar un comentario